A menos de un año para el inicio del Mundial 2026, la Selección Argentina ya tiene asegurado su lugar en la competencia, pero en el horizonte aparece un desafío de gran nivel: la Finalissima frente a España. El encuentro, que reedita el formato estrenado en 2022 con la recordada victoria argentina sobre Italia en Wembley, se jugaría en marzo del próximo año, aunque la decisión no cayó bien en Lionel Scaloni.

El entrenador campeón del mundo manifestó su descontento por la fecha fijada y apuntó directamente a la organización. “Hubo tiempo para hacerlo antes”, reclamó en diálogo con TNT Sports, dejando en claro que hubiese preferido no tener este compromiso tan cerca de la Copa del Mundo. Para Scaloni, el principal problema radica en el calendario europeo, condicionado por la Nations League, torneo que, según sus palabras, “terminó perjudicando a Sudamérica y limitó todas las opciones previas”.

De esta manera, la "Albiceleste" deberá afrontar un examen de máxima exigencia apenas tres meses antes de su debut en el Mundial de Estados Unidos, México y Canadá. Para el técnico, el duelo contra una potencia como España es valioso en términos competitivos, pero también supone un riesgo en un momento en el que la prioridad será llegar con el plantel completo y sin lesiones.

“Ganar siempre es complicado y contra selecciones de esa talla mucho más. Lo importante es sentirnos preparados para competir por otro Mundial. Trabajaremos intensamente y esperemos tener la fortuna de que todos lleguen bien”, concluyó Scaloni, consciente de que la Finalissima ya es prácticamente un hecho.